domingo, 4 de julio de 2010

EL RETRATO DE DORIAN GRAY... pues sí que ha cambiado el cuento

Cuando uno estaba en el instituto y empezaba a dar un inglés a nivel decente, te hacían leer pequeños libros en el idioma de Shakespeare. Uno de los más entretenidos y originales era "El Retrato de Dorian Gray".

En esta novela un joven aristócrata recién llegado a Londres contacta con la alta sociedad londinense, convirtiéndose en amigo, entre otros, de un vividor y un pintor. Éste último inmortaliza a Dorian en un cuadro, el cual acaba envejeciendo para facilitar la juventud eterna que tanto anhelaba el joven protagonista.


Sin embargo uno, a pesar de su inquietud cultural, se quedó en la versión juvenil, y llega al cine y entra en estado de shock al ver una película, en su primera parte, llena de orgías y libertinaje sexual... ¡el cuento no era así, mamá!

Y es que, queridos lectores, el film es una oda al hedonismo tan explícito que hace perder al guión toda la fuerza que el relato original tenía. Mala adaptación, por tanto, en lo relativo a este tema.

En sí, la película (una vez recuperados de la impresión) está entretenida, no se hace lenta.

Los actores no me gustaron mucho. No dudo que el protagonista, en el papel de Dorian, sea el arquetipo perfecto por su belleza, pero hay que pedir un poco más de expresividad en la actuación, porque además a esto le tenemos que sumar que él es una mezcla entre David Civera y David Bisbal con pelo liso largo... y entonces ahí uno ya se pierde.


Pero es que, además, la actriz protagonista es un clon de Ariadna Gil y el actor que da vida a Henry (el vividor que le lleva por la mala vida, el mejor personaje sin duda) es una fotocopia de Raúl Cimas, actor de Muchachada Nui... y así la peli ya no hay quien la sostenga.


Total, un cierto regusto amargo al salir de la sala por lo que pudo ser y no fue esta adaptación. Además, no puedo dejar de preguntarme: ¿por qué el cuadro tiene que cobrar vida con esos efectos especiales tan hollywoodienses? Sobraba totalmente, está fuera de lugar en el contexto de la novela original.


Lo mejor: un Londres de alta sociedad bien retratado, muy oscuro. El "terror" y el suspense están bien llevados (pero es más mérito de Oscar Wilde, el autor de la novela, que del director de esta película)
Lo peor:
mala adaptación, en general, del original. Se les fue la mano con lo explícito de muchas escenas

NOTA:
5

Para más información: El Retrato de Dorian Gray

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