Le ha salido demasiado denso el nuevo documental a Michael Moore. Tema espinoso: el capitalismo, pero demasiado general para hacer que un guión llene una película con un hilo central medianamente interesante o que al menos capte la atención del espectador.No lo consigue porque se dispersa mucho en el tema y acaba teniendo una mezcla de datos y más datos, y tecnicismos muy económicos, que te los puedes creer o no, pero pecan de frialdad en este tipo de denuncias.
Sin duda, la comparación con Farenheit 9/11 hace daño a Capitalism porque donde aquélla emocionaba, ésta aburre; consiguiendo con ello mirar el documental sin mucha atención y restándole credibilidad, que es lo peor que le puede ocurrir a este tipo de películas.
Otro problema es el localismo de la historia, el desarrollo es muy estadounidense; también en Farenheit, pero es distinto porque aquéllo era un documento de un hecho internacional. Aquí se centra mucho en Detroit y esas ciudades que fueron y ahora no son ni la mitad de lo que eran por culpa del capitalismo.
Echo también de menos entrevistas donde la gente quede retratada, sin respuesta, diciendo la verdad a la cara. Le falta emoción, por tanto. Es un documental muy técnico y muy plano; la gente ya no pica con Michael Moore.
En resumen, unos dirán que tilda de demagogia y manipulación, otros dirán que es pura verdad y valentía... yo no sé muy bien qué pensar: si es verdad lo que cuenta, da miedo; si es mentira, ¿de quién puedo fiarme en este mundo?
LO PEOR: Mucha voz en off y muchos datos provoca que sea demasiado largo, demasiado denso, muy pesado.
LO MEJOR: El magnífico paralelismo entre la Roma antigua y el mundo actual en la primera escena.
NOTA: 5
Para más información: Capitalism
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